Pliega las islas que crecieron en las letras.
El árbol de la familia es la invención de un alfabeto.
Una patada en el centro de la luz.
En el ombligo, las abuelas tejen lazos
los padres atan nudo.
Los hijos abren un tajo en el centro de la luz
y se arrojan adentro. El nacimento es un mantel
de sacrificio de una levedad purísima...
La frontera enhebra un nombre y una fecha
en cada niño. Así se habita lo natal.
En el término de un año, Era de Agua.
Inundación tras inundación.
Valeria Meiller, El recreo, El final de la noche, 2010; disponible en: http://elfindelanoche.com.ar/archives/1500
Blog de Valeria: http://blondonblog.blogspot.com/
me encanta la ideologia y la forma de este poema. ademas permite asociaciones significativas ilicitas y multiples lecturas. Gracias
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado. Te recomiendo la lectura de todo El recreo. Podés hacerlo en http://elfindelanoche.com.ar/archives/1500
ResponderEliminarSaludos.